Asistir al colegio Dominicano de la Salle durante 14 años y salir triunfante, con un vestido rosado y un moño lleno de flores. Confieso que en esos fantasticos años los retos más grandes fueron minúsculos. Y entre mis peores errores y desafios de esos tiempos se pueden contar:
Escribirle esa carta a Diomedes
Nunca confesarle a Benjamín que me despeinaba desde que lo veía.
Existir con ese tinte rubio (aunque eso fue divertido también :).
No ir a la convivencia porque mi papi me cacho una mentira (que drama).
Esconder de papi los rajados de mis pantalones.
Botar mis converse blancos
Tener que hacerle otra vez mi súper actuación de que me llego la menstruación al director porque me encontró brillando.
Dejar mi querido diario en la mochila.
A la dirección otra vez.
Pasar química.
Que si pase matemática.
Perder mi mascota de poesías.
Que si el profesor de Sociales es un Pajarón.
Odiar a Cristina porque sólo andaba con Yasser y ya no me hacía caso.
Después vinieron mis maravillosos años de universidad, de la cual también salí triunfante, ahora con un vestido negro de Badgley Mischka cubierto cruelmente y en contra de mi voluntad por una toga y un birrete. Apec trajó muchas cosas buenas a mi vida, y algunos de cuantos errores que cometí en esa epoca fueron:
Darme ese jumo la primera vez que salí con María Teresa (pero que gozaaa!).
No estudiar para ese examen de diseño gráfico.
Confiar en quién no debía
Amargarme por Bono alguna que otra vez
Sentirme culpable por haber dado un pal de paseitos con Paul
Alargar tanto una relación sentimental que no iba pa palte.
Talvez algún otro más que no recuerdo ahora (por ejemplo el corito ese con el primo de mi amiga).
Escribirle esa carta a Diomedes
Nunca confesarle a Benjamín que me despeinaba desde que lo veía.
Existir con ese tinte rubio (aunque eso fue divertido también :).
No ir a la convivencia porque mi papi me cacho una mentira (que drama).
Esconder de papi los rajados de mis pantalones.
Botar mis converse blancos
Tener que hacerle otra vez mi súper actuación de que me llego la menstruación al director porque me encontró brillando.
Dejar mi querido diario en la mochila.
A la dirección otra vez.
Pasar química.
Que si pase matemática.
Perder mi mascota de poesías.
Que si el profesor de Sociales es un Pajarón.
Odiar a Cristina porque sólo andaba con Yasser y ya no me hacía caso.
Después vinieron mis maravillosos años de universidad, de la cual también salí triunfante, ahora con un vestido negro de Badgley Mischka cubierto cruelmente y en contra de mi voluntad por una toga y un birrete. Apec trajó muchas cosas buenas a mi vida, y algunos de cuantos errores que cometí en esa epoca fueron:
Darme ese jumo la primera vez que salí con María Teresa (pero que gozaaa!).
No estudiar para ese examen de diseño gráfico.
Confiar en quién no debía
Amargarme por Bono alguna que otra vez
Sentirme culpable por haber dado un pal de paseitos con Paul
Alargar tanto una relación sentimental que no iba pa palte.
Talvez algún otro más que no recuerdo ahora (por ejemplo el corito ese con el primo de mi amiga).
A estas alturas mi vida se basa en venir a trabajar día tras día, salir a bonchar todos los fines de semana y soñar con llegar algún día a algún lado. Pero lo pensé un poquito y no pretendo iniciar a mis cortos 23 una rutina de vida que llevare hasta la tumba, no no y no!
Y si en estos 23 años de vida, he cometido pocos traspiés, creo yo, pues hasta de lo malo siempre he tratado de sacar algo bueno, recuerdos, experiencias, sonrisas y hasta poesías. Pues creo que este es el momento para hacer uno que otro tollo. El momento justo y perfecto para cometer unos cuantos errores que enriquezcan mi día a día, pa que me den cosquillitas, emoción y esa sensación en el pecho y el estomago cuando lo unico que sale es decir: diablo y pa que yo me metí en eto? ahora si fue!
Y si en estos 23 años de vida, he cometido pocos traspiés, creo yo, pues hasta de lo malo siempre he tratado de sacar algo bueno, recuerdos, experiencias, sonrisas y hasta poesías. Pues creo que este es el momento para hacer uno que otro tollo. El momento justo y perfecto para cometer unos cuantos errores que enriquezcan mi día a día, pa que me den cosquillitas, emoción y esa sensación en el pecho y el estomago cuando lo unico que sale es decir: diablo y pa que yo me metí en eto? ahora si fue!